El Partido Popular está en campaña, pero parece que más que de cara a las elecciones europeas del próximo 25 de mayo, el discurso está más centrado en la campaña de las autonómicas del próximo año. Los oradores del PP dedican gran parte de sus esfuerzos a demonizar al 'tripartito' "comunista y catalanista" -las encuestas dan grandes posibilidades a PSPV, Compromís y Esquerra Unida de sumar para conseguir la mayoría absoluta en 2015-, en lugar de centrarse en un discurso en clave europea.
Así, mientras en Sagunto el presidente local del PP, Sergio Muniesa, comenzaba su intervención recordando que la ciudad tuvo la "mala suerte" de estar gobernada "por otros" -en referencia a PSPV, Compromís y EU- en un gobierno marcado por la "desidia, la crisis, la incoherencia y en gastar más de lo que se ingresaba", el número dos de la candidatura popular, Esteban González Pons, aprovechaba la condena al ataque de la sede del PP en Calpe para cargar contra el 'tripartito'.
El candidato del PP se ha referido a que los votantes del PP "no tienen la misma libertad que los de PSPV, Compromís o Esquerra Unida", ya que, aseguraba que son víctimas de "coacciones". Además, siguiendo el argumentario oficial, se refería a la izquierda "catalanista" del Bloc y a la izquierda "radical", e insistía en que "nuestro partido no tiene alianzas con Catalunya, ni con partidos minoritarios radicales ni con partidos sin programa".
El PP, el único partido valenciano
Tanto González Pons como el president de la Generalitat, Alberto Fabra, insistieron en que el PP es el único partido valenciano, así como tampoco faltaron las alusiones a la herencia recibida de los gobiernos socialistas de Rodríguez Zapatero, "si no nos votáis ganarán quienes nos metieron en la crisis y si no votáis, lo harán quienes han destrozado nuestra sede en Calpe".
Fabra, quien se refirió a los socialistas como aquéllos marcados por la "esquizofrenia política" y por ser "la contradicción hecha pancarta", afirmó que el PSOE "nos engañó y quieren seguir engañándonos", al tiempo que se refería a Zapatero y su presencia en Alicante, "viene a pedir el voto y lo que tendría que hacer es pedir perdón".