Antonio Luque (Sevilla, 1970), más conocido como Señor Chinarro, es un tipo singular. Quiere decirse que va por su cuenta, y que su verborrea no tiene bando, de modo que durante una hora de torrente dialéctico hay para todos: PSOE y PP, la familia y el individuo, el movimiento 15-M y César Alierta, Málaga y Sevilla. Quizá porque el desencanto del Señor Chinarro no es con lo que pudimos ser y no fuimos, sino con lo que somos y siempre seremos.
En unas horas, Antonio Luque se marcha a Chile a presentar en acústico su último disco, Enhorabuena a los Cuatro (Mushroom Pillow, 2013). El lugar del encuentro es los Baños del Carmen, un antiguo balneario de principios del siglo XX al pie de la costa oriental de Málaga, y que tiene un no sé qué, un encanto que casi nadie acaba de explicar. Sobre su rehabilitación se discute desde hace 30 años, y finalmente, aquí se construirá un hotel, motivo suficiente para Luque: "Es que arreglar un hotel [se refiere al Palacio de Miramar] permite menos mangazos que hacer uno nuevo. No se puede tener menos vergüenza". Brilla el sol y hace calor. "Andalucía está para esto: charlar, tomar el sol con una cerveza… No se puede hacer otra cosa. Hay que dejar de intentarlo".
¿Y usted cree que se protesta lo suficiente?
Aquí la última gran protesta fue un cámping. No sabemos hacer nada fuera del cachondeo. Hay una cosa que se nos daba bien a los españoles aparte de la guasa, que era matar. Teníamos fama de sanguinarios y de ladrones. Ahora no podemos hacer eso y sólo nos queda el cachondeo. Igual sería mejor que volviéramos al medievo, estaríamos más entretenidos.
¿No será que tantas razones para protestar saturan?
Es que los que tienen el poder hacen muy bien la lucha. Nos mandan mensajes triviales, conformistas, todo orientado a tener a la gente "atontá". Nos conformamos con pagar nuestros impuestos para que nos dejen tranquilos. Como la mafia italiana: "Coge lo que quieras pero déjame tranquilo". No hay palabra que mejor los defina que mafia. Son profesionales, lo tienen todo atado.
Pues ahora parece que la salida está en el turismo…
Quitando el mes y medio de verano, la terminal nueva del aeropuerto está vacía. Ahora viene la gente en barco: ¡pues se podían haber ahorrado el aeropuerto! Yo recuerdo lo de Diógenes el Cínico y Alejandro Magno: se puso el emperador delante para ayudarle, y Diógenes le dijo que lo único que quería es que no le quitase el sol. Si los políticos hubiesen encontrado una manera de cargarse el sol, lo habrían hecho.
Sevillano viviendo en Málaga: ¿Habría un Señor Chinarro de no ser andaluz?
Es que yo nací en Sevilla, no lo puedo evitar. Aunque me hubiera gustado haber nacido en otro sitio. El malagueño es más abandonado, el sevillano pone más cariño en su ciudad… Pero por otra parte el sevillano es demasiado tradicional, demasiado rancio. Supongo que va unido: más rancio, más cuidadoso. Aquí está todo más descuidado, pero es más libre. Esto era Málaga la Roja, y Sevilla, de donde vino Queipo de Llano a matar a los malagueños. De hecho, todavía está el fajín de Queipo de Llano en la Macarena. La tierra de uno está metida en la manera de ser. Y la manera de ser hace las canciones.
Publicó Exitus (El Aleph, 2012) el año pasado: ¿Escritor o músico?
¡Hombre, es que las canciones hay que escribirlas! Que luego pongas música, que sea texto largo, que rime, que no rime… Da igual. Eres escritor. Es verdad que en el rock se dé mucho el caso de perfectos indocumentados que no leen nada, que se ponen a escribir una letra y encima triunfan… Como no saben qué decir, dicen "yo te quiero, yo te vi, tú no me querías, yo estoy triste", y resulta que eso es lo que la gente quería escuchar. Es la paradoja del rock.
Es muy crítico con la situación de la industria musical: ¿Internet acercará el músico a la gente?
¡Al contrario! Antes había unos intermediarios que se llevaban una comisión, que luego era más de lo que decían, pero algo dejaban. Pero Telefónica directamente está diciendo que no va a dar nada. Es más, César Alierta está diciendo que todo lo que hay colgado en Internet es suyo. ¿De qué me sirve que haya menos intermediarios si el que hay es mucho peor? ¿Qué prefieres, que te piquen diez mosquitos o una cobra? Yo prefería los mosquitos, te dejaban vivir.
Al menos da conciertos en Chile…
Yo para ensayar tengo que ir a Valencia, no te digo más. Es que ahora están los que están y traen a los que a ellos les gustan. Podría ser peor, podrían programar ejecuciones en la Plaza de la Constitución. De momento, programan a Paloma San Basilio.
¿Pero eso es lo que pide la gente?
Es que es al revés. Ellos provocan que la gente pida eso, atontándola cada vez más: y tampoco a la gente para atontarla hace falta gran cosa, con un pequeño empujoncito…
¿De qué sirvió el 15M?
Claramente no sirvió para nada. Recuerdo que se hacían votaciones para ver cuándo iban a votar. Cuando llegó a la fase metavotación me pareció muy divertido. Tengo relación con alguno de los líderes del 15M de Madrid y cuando despotrico me da la razón. Y está bien que la gente joven se queje, es mejor eso a que no hubiera pasado nada, pero… Yo vi en la de Valencia un cartel que decía "Necesitamos: aceitunas, queso, batido de chocalate Choleck…". Me pregunto qué habría sido de la reunión si alguien hubiese llevado Cacaolat. Al final es todo igual: un mes más y hubiesen cobrado peaje por pasar por la plaza. Es la manera de ser del humano. ¿Una familia qué es? Es un embrión mafioso. Tú dejas a unos jóvenes que se pongan en una plaza, se empiezan a organizar y en un mes hay una mafia. Igual que las abejas hacen colmenas, nosotros hacemos mafias, y no hay manera de solucionar eso.
Acabado el rescate, ¿cree que "hemos salido de la UVI", como dicen?
El hemos salido de la UVI para un bético está cargado de significado, y que Rajoy haya pillado la estética loperiana es una señal de que al final acabará con la jueza Alaya. Sí, seguramente de aquí a que vuelva a haber elecciones habrá cuatro o cinco indicadores positivos, y las familias hayan podido colocar a los niños limpiando wáteres en los hoteles de nueva construcción. Es que la estafa se ve claramente en qué consiste, y ahora se quedan con los pisos, con el dinero de los impuestos, las hipotecas que sigues debiendo, los salarios a la mitad… Es una jugada de casino. Todos nos comportamos como mafiosos y empezamos a comprar pisos para dejarlos vacíos por si algún día valían el doble. Pero entre las mafias gana la más potente. ¿Quién ganó? La banca, siempre gana la banca. Está todo calculado desde el principio.
"Hay cosas que no se pueden demostrar", dijo el presidente del Gobierno.
Yo sé qué clase de personas son. Y lo sabe todo el mundo. Pero el ‘dame pan y dime tonto’ sigue funcionando, y la corrupción da igual, yo no te pillo a ti lo de Bárcenas, y yo no te pillo a ti que ese trabajo que hiciste no lo facturaste. Pero han puesto la cerveza a cincuenta céntimos y eso es un arma de destrucción masiva. Yo creo que con esto ya tienen para fusilarme…