El nuevo portavoz de la Conferencia Episcopal Española (CEE), José María Gil Tamayo, ha dicho hoy que el uso de cuchillas en la valla de Melilla "no es la manera" de combatir la inmigración porque "el inmigrante no es un peligro" y ha pedido a las autoridades que no se sitúen en "una cultura del descarte".
El secretario general de la CEE, que ha hecho estas declaraciones en la rueda de prensa final de la Asamblea Plenaria de los Obispos que se ha celebrado esta semana, ha confesado tener una "especial sensibilidad" hacia este tema por ser hijo de emigrantes españoles en Alemania.
Aunque se ha mostrado de acuerdo con regular la situación de estas personas ha precisado que hay que hacerlo "desde el respeto básico y esencial a la vida".
"No se puede atentar contra unas personas que buscan mejores condiciones de vida", ha sentenciado el sacerdote, quien ha agregado que los inmigrantes "aportan a la construcción social de un país".
Se ha referido, además, al viaje del papa a la isla italiana de Lampedusa donde rechazó "la cultura del descarte" de unas personas que no solo tienen la lacra de la pobreza sino también la de la falta de libertad y del peligro para su vida, incluso, por sus opciones políticas.
Religión en las escuelas
Tamayo ha enmarcado hoy la oferta de la asignatura de religión en el derecho "esencial" que tienen los padres, más allá de los acuerdos del Estado con la Santa Sede. El nuevo secretario general de los obispos ha dicho que no ha tenido tiempo de analizar la Lomce, aprobada ayer en el Senado, aunque ha insistido en que la Constitución reconoce a los padres el derecho a la educación de sus hijos, que incluye una formación "conforme a sus convicciones".
No obstante, ha precisado que los acuerdos Iglesia-Estado establecen que la religión forme parte de las asignaturas en las enseñanzas que contempla la nueva ley, "porque es el arco de edades que está firmado y pactado". "Y los pactos hay que observarlos", ha añadido.
Gil Tamayo ha incidido en que se debe facilitar a los padres el cumplimiento adecuado del derecho que tienen "en el marco del desarrollo curricular".
El portavoz se ha remitido al desarrollo reglamentario de la ley, aunque ha abogado por "encontrar de una vez el lugar para pensar con una mentalidad más abierta por encima de las puras opciones ideológicas".
"Hay que pensar en clave de derechos fundamentales y no tanto en la contienda política", ha subrayado.