El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, se ha dirigido a CiU para indicar que la reciente abdicación del rey Juan Carlos no es el momento adecuado para hacer "política pequeña". La previsible abstención de los nacionalistas en torno a la aprobación de la ley orgánica que regulará este paso ha llevado al jefe del Ejecutivo a lanzar este mensaje desde Portugal, donde se encuentra junto a seis de sus ministros para participar en la cumbre hispanolusa.
Tras la reunión entre ambos países, Rajoy ha ofrecido una rueda de prensa junto a su homólogo, Pedro Passos Coelho, y ha negado las acusaciones de los convergentes. Esta mañana, su portavoz en el Congreso, Josep Antoni Duran i Lleida, ha cargado contra los dos principales partidos y los ha acusado de pactar previamente los movimientos de la abdicación. Según Duran, ambos le pidieron firmar conjuntamente la tramitación de la ley orgánica en lectura única y él se negó.
Rajoy ha desmentido que todo estuviera pactado entre PP y PSOE y ha asegurado que el Ejecutivo ha actuado "con lealtad" en este proceso. "Nadie ha sido ignorado y todo el mundo puede opinar lo que quiera, pero lo único que me gustaría es que en una ocasión como ésta no hiciéramos política pequeña".
Como contraste, el presidente del Gobierno ha alabado el papel de la dirección del PSOE en este asunto y ha elogiado a su secretario general, "don Alfredo Pérez Rubalcaba". El comportamiento del todavía máximo responsable de los socialistas ha sido calificado de "serio, ejemplar y con sentido de Estado" por Rajoy, quien ha añadido que no tiene "la más mínima duda de la posición del PSOE en las próximas fechas" sobre el debate entre Monarquía y República.
Preguntado sobre cuándo estará lista la norma que regulará la figura del rey Juan Carlos, el presidente no ha dado fechas y sólo ha dicho que el "estatuto o norma" se explicará "en su momento".
