El Gobierno de Guinea Conakry ha confirmado este sábado, tras realizar las pruebas de laboratorio correspondientes, que 61 personas han fallecido hasta el momento como consecuencia del brote del virus del Ébola en el país, donde se han registrado 109 casos de contagio.
"Se estableció una nueva confirmación basada en los casos probados en el laboratorio", dijo el portavoz del gobierno guineano, Damantang Albert Camara, en un comunicado difundido por la agencia Guinée News.
Así, el Comité Nacional de Crisis Sanitaria, formado por un equipo de científicos nacionales e internacionales, revisó todos los casos sospechosos del virus del Ébola en Guinea y determinó que desde enero a abril de 2014 hubo 109 casos de contagio y 61 muertes.
El comunicado detalló que 15 de los fallecimientos se produjeron en Conakry, 34 en Guéckédou, 10 en Macenta, uno en Dabola y otro en Kissidougou.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) señaló que el actual brote de Ébola registrado en África Occidental es el desafío más grande al que se ha enfrentado en toda su historia de lucha sanitaria sin fronteras.
Según cifras proporcionadas por la OMS, hasta el pasado día 8 de abril se habían detectado 157 casos en Guinea Conakry -donde surgió el brote el pasado 22 de marzo- y de ellos 101 enfermos han muerto y 67 pudieron ser confirmados por pruebas de laboratorio,
En la vecina Liberia se han registrado 21 casos, entre ellos 10 muertes, y de éstas cinco fueron confirmadas en laboratorio, de acuerdo con la OMS, si bien las autoridades liberianas hablan de once fallecimientos.
En Sierra Leona, dos pacientes de los que se sospechaba dieron negativo en las pruebas médicas.
Así, África Occidental está experimentando su primer gran brote de ébola, un virus contra el que no existe vacuna o tratamiento efectivos.
El virus del Ébola, que surgió por primera vez en 1976 en Zaire (actual República Democrática del Congo) y Sudán, se transmite por contacto directo con la sangre y los fluidos y tejidos corporales de las personas o animales infectados.