El acuerdo de paz alcanzado en el seno de IU de Madridtiene un flanco débil: Rivas-Vaciamadrid, la mayor alcaldía de España que controla la coalición que dirige Cayo Lara.
El pasado mes de noviembre la Cámara de Cuentas de Madrid detectaba un desfase contable de 20 millones de euros en la Empresa Municipal de la Vivienda (EMV), lo que desató una importante crisis en la organización a nivel local, que se fraccionó entre quienes exigieron tomar cartas en el asunto de manera urgente, capitaneados por el portavoz municipal y coordinador local, Pedro del Cura, y quienes preferían contemporizar, con el alcalde José Masa a la cabeza. Del Cura es una de los miembros de la minoría de IUCM que entrará en la nueva Ejecutiva de consenso, según fuentes conocedoras de la negociación.
La pugna estuvo a punto de dinamitar el partido, provocó una crisis del Gobierno local y un hecho insólito: la petición formal de dimisión que la militancia local hizo a su propio alcalde.
La situación pareció arreglarse tras la mediación de la dirección regional. La comisión de investigación que analizó los problemas de la EMV respaldó, con el apoyo de todos los partidos, la gestión de IU y acordó poner en marcha "un plan de control financiero, a ejecutar por la Intervención municipal, en el que se incluya la fiscalización de la EMV desde su creación".
Las conclusiones formaban parte de un acuerdo mayor sellado entre Masa y Del Cura para normalizar la situación en el municipio madrileño, plasmado en un documento al que ha tenido acceso eldiario.es bajo el título “Hoja de ruta para el diálogo y acuerdo que garantice la cohesión de IU, la estabilidad municipal y el cumplimiento programático”.
Un guion de trabajo que la Presidencia regional de este jueves avalará en el marco del pacto alcanzado en el seno de IUCM para poner fin a la fuerte división interna, pero que el alcalde no cumple, según fuentes de IU de Rivas. Estas mismas fuentes consideran que el regidor intenta torpedear el acuerdo regional, contrario a sus propios intereses.
El pacto señala, como primer punto, las conclusiones de la comisión de investigación sobre la EMV y anticipa la línea a seguir una vez concluya la auditoría interna: abrir el gobierno de la empresa municipal a la participación vecinal y establecer un debate sobre su modelo futuro de gestión “para el refuerzo del control público”, una de las cuestiones que destacaba en su informe la Cámara de Cuentas.
Hasta ahí todo sigue el guión previsto. Sin embargo, este mismo martes, poco después de que la dirección de IUCM convocara la reunión que dará luz verde al pacto regional, Masa convocaba una Junta General Extraordinaria de la EMV. Ambas citas tendrán lugar este jueves.
El orden del día, al que ha tenido acceso eldiario.es, incluye la aprobación del Programa de Actuación, Inversiones y Financiación (PAIF) de 2014 “para su inclusión en el Presupuesto General del Ayuntamiento”, así como la contratación de una “auditoría externa” y el planteamiento de propuestas para realizar un “estudio del modelo de gestión”.
Todas estas materias debían ser pactadas entre el Gobierno municipal que dirige Masa y la Asamblea de IU de Rivas que coordina Del Cura, según la hoja de ruta que ambos habían acordado con la mediación del Coordinador de Política Institucional de IUCM, Raúl Calle, el pasado 14 de marzo.
Denuncia por vulneración de derechos fundamentales
La delicada situación en Rivas tiene otro frente abierto en forma de derivada judicial. El coodinador local de IU, Pedro del Cura, ha presentado una denuncia en el juzgado por vulneración de sus derechos fundamentales contra el alcalde José Masa.
Según la denuncia, que obra en poder de eldiario.es, el alcalde destituyó de sus cargos en el Gobierno municipal a Del Cura, que quedaba únicamente como portavoz del grupo municipal de IU.
Esta decisión tenía pareja una nueva situación económica para Del Cura: ya no cobraría los emolumentos asociados a los cargos que perdía. El portavoz de IU dirigió entonces un escrito al alcalde para que, al igual que sus homólogos de PP y PSOE, se retribuyera a Del Cura por la dedicación exclusiva que supone el cargo.
El Ayuntamiento negó la petición alegando que dicha competencia corresponde al Pleno, no al Consistorio. Efectivamente, el Pleno municipal ya aprobó en su momento conceder la dedicación exclusiva a los portavoces de PP y PSOE y dejó fuera al de IU ya que en ese momento ejercía funciones de Gobierno retribuidas.
El escrito presentado ante el juzgado denuncia una situación paradójica. Del Cura, funcionario en excedencia, debe elegir entre continuar como portavoz municipal de IU o abandonar su acta de concejal para reincorporarse a su trabajo. Esta situación, continúa la denuncia, provoca “una discriminación” en relación con sus homólogos que atenta “contra el artículo 14.2 de la Constitución porque es de tipo político y no está basada en una desigualdad razonable” y el 23.2.