El vicepresidente de la Comisión y responsable de Asuntos Económicos, Olli Rehn, se ha declarado este martes "preocupado" por la posibilidad de un largo periodo de baja inflación en Europa porque a su juicio ralentizará el proceso de reequilibrio de la economía de la eurozona.
No obstante, Rehn ha sostenido que la recuperación económica está "ganando terreno y se está reforzando". "Si la crisis de seguridad en Ucrania y las relaciones entre Europa y Rusia no hacen descarrilar la economía europea, vamos hacia una mejor dirección, también en la reducción del paro", ha destacado Rehn a su llegada a la reunión del Eurogrupo.
"Estoy preocupado por la posibilidad de tener un largo periodo de baja inflación en Europa, en la eurozona, porque esto afectaría negativamente al proceso de reequilibrio de la economía de la eurozona. Por un lado, aumentaría las rentas reales disponibles, pero por otro lado tendría un efecto de ralentizar el reequilibrio de la economía de la eurozona", ha alegado el político finlandés.
Para Rehn, la mejora en la situación económica se detecta incluso en el caso de Grecia, que "se está recuperando" y tiene "mejores perspectivas tras muchos años de ajustes dolorosos". El Eurogrupo tiene previsto aprobar este martes el desembolso de un nuevo tramo del rescate griego tras los nuevos ajustes pactados con la troika y aprobados por el parlamento heleno.
Por lo que se refiere a Portugal, cuyo rescate de 78.000 millones de euros expira a mediados de mayo, Rehn ha dicho que la Comisión pensaba y sigue pensando "más vale prevenir que curar" por lo que se refiere a la estrategia de salida. No obstante, ha admitido que ha habido "mejoras significativas" en la economía portuguesa y en la percepción en los mercados y ha dicho que corresponde al Gobierno de Lisboa decidir si apuesta por una salida limpia o pide una línea de crédito preventiva, algo que debe resolverse "en las próximas semanas".