Hervé Falciani (Mónaco, 1972) es hacker y exbanquero. Y ahora, candidato a las elecciones europeas por la Red Ciudadana Partido X. La elección para que someterse a unas primarias que encabezarán la lista -todo apunta a que puede encabezarla- por esperada, no ha dejado de ser sorprendente. Falciani, que es ciudadano francés, tiene una orden de busca y captura de Interpol. El informático extrajo 400 gigas de información de los archivos de la filial en Ginebra del banco HSBC. Su osadía le puede costar la cárcel por supuesto en Suiza, y en otros muchos países que como el europeo reconozcan derechos como el secreto bancario. Falciani dice que era necesario "tomar este riesgo" y basa su programa en desvincularse por completo de la política tradicional. "No me voten como una cara de partido, voten respaldar un proyecto" y pone a disposición de sus compañeros la decisión de tomar posesión finalmente del escaño. Falciani habla desde Francia donde en este momento trabaja con la Justicia.
Empecemos por lo básico. Usted es ciudadano francés, ¿Se ha empadronado en España para poder presentarse como candidato?
He solucionado la parte técnica y me he empadronado aquí porque además estoy trabajando para una Universidad. Pero no puedo dar más detalles por temas de seguridad.
¿Es compatible su labor actual trabajando con la Justicia española, francesa e italiana con la ocupación que supone esta candidatura?
Sí, yo trabajo todo el tiempo. No tengo vida. Dedico mi tiempo a trabajar. Me parece perfectamente compatible. Es un sacrificio más que hago porque creo que merece la pena.
¿Continuará colaborando con la Justicia y en el programa de testigo protegido?
Sí. No es la primera vez que asumo riesgos. Pero si no se hace nada no se cambia nada. Me puedo equivocar pero lo que sé es que sin medios no podremos conseguir el objetivo que perseguimos de luchar contra la corrupción. Desde el Partido X estamos haciendo un proyecto para cruzar datos bancarios y detectar así posibles patrones de fraude que ayuden a combatir el problema.
Interpol tiene una orden contra usted de busca y captura. ¿Eso no supone ningún problema para presentarse a estas elecciones?
No es ningún problema. Ahora bien. Se puede dar la circunstancia de que yo tenga que ir como eurodiputado a algún país en los que la orden está activa -no lo está en Italia, Francia y España- y me detenga. ¿Se imagina que me detienen como eurodiputado por lo que hice en Suiza? Sería un escándalo. Creo que algo así sería bueno para nuestro proyecto para poner en evidencia los paraísos fiscales.
¿Por qué le han elegido a usted?
Por lo que represento. Soy un arma que se debe utilizar para luchar contra la corrupción. Contra la desregulación financiera. Y en esta posición es donde se ha visto que podía ser más útil.
En cierta forma, se vuelve usted así líder del Partido X?
Aquí no manda nadie. Esto no es un partido político. Esto es una red de colaboración ciudadana. Lo que tenemos son proyectos. Son nuestra mejor presentación. Lo que la red ha hecho en casos como el
15MpaRato, el
Opeuríbor, o
Los Correos de Blesa es lo que el ciudadano tiene que apoyar cuando vota. Lo que buscamos ahora es tener la ayuda de la gente para continuar.
Deme una razón para votarle a usted
No tiene que votar a una cara. Esto no va de eso. Esto no es política como tal. Tiene que votar a lo que proponemos. Tenemos expertos en todas las áreas, abogados, inspectores de Hacienda, informáticos. Tiene que votar si quiere acabar con la corrupción. Si quiere que los bancos no sigan sin compartir información. Vote por el objetivo común. Este es el mejor modo de obtener estos resultados.
Sí pero no deja de ser usted la cara visible del partido
Ya le he dicho que en realidad soy un arma que se debe utilizar. Lo digo en el sentido de que soy el único que tengo capacidad para hablar con las administraciones, los jueces, los fiscales, con banqueros... les hablo de igual a igual y me escuchan. Ahora tenemos la oportunidad de hacerlo además a nivel europeo.
Si logra el escaño de eurodiputado, ¿va usted realmente a ir al Parlamento Europeo?
Haré lo que diga la Red. Donde yo sea más eficaz allí estaré. Si me dicen que me necesitan más en España por cuestiones de estrategia, me quedaré. Decidimos todos juntos y lo que se decida estará bien.
Le ha tendido los brazos a otras formaciones políticas, como Podemos y Equo. ¿Ha hablado usted personalmente con ellos?
Queremos compartir esfuerzos y objetivos con otras formaciones. Es el sentido real de la democracia. No es un ciudadano peleando con otro ciudadano. Esperamos con ilusión su respuesta.
¿Qué va a aportar en el Parlamento Europeo?
Los populares acaban de elegir a
Jean-Claude Juncker, el que fuera primer ministro de un paraíso fiscal como Luxemburgo para presidir la Comisión Europea. ¿Se imagina? Se necesita que alguien represente lo contrario de lo que él supone. No podemos dejar que los bancos sigan decidiendo por los ciudadanos.