Las alusiones de Rosa Díez sobre el incremento de pobreza infantil y el aumento de las desigualdades en España dieron pie a ultima hora de la noche, durante la primera jornada del debate del estado de la Nación, a un agrio intercambio de reproches, e incluso de insultos, entre la portavoz de UPyD y el presidente del Gobierno.
“Muchos niños se van cada día a la cama sin cenar. Es un drama que nos debe avergonzar”, afirmó la líder de la formación magenta, quien, después de lanzar otros ataques a la política social y económica de Rajoy, se mostró dispuesta a “tenderle la mano", "porque nos importa España”.
Rosa Díez subió a la tribuna de oradores desde el principio muy combativa y fue desgranando más de una veintena de datos “oficiales” y muy negros sobre la “realidad de España” que, según dijo, había echado de menos en el discurso del presidente del Gobierno y que le llevaron a sentenciar: “no está bien España, señor presidente. La verdadera imagen de España es sombría y opaca. Y eso es insoportable”.
Además, acusó a Rajoy de haber utilizado en estos dos años “mucha palabrerías y un cierto engaño” por las promesas que lanzó durante la campaña electoral y que luego no ha cumplido. Como bajar los impuestos, “cuando a la semana los estaban ya subiendo”. “Ya no tienen credibilidad y eso es preocupante”, le espetó la líder de UPyD,
También calificó como “deshonesto” que después de haber aplicado “políticas nefastas” de ajuste “venga ahora a atribuirse el mérito de haber salido de la recesión”.
Mientras Díez hablaba, el presidente la miraba desde el banco azul sin disimular su incomodidad. De hecho, nada más subir a replicarla, le dijo con sorna: “hombre, yo le agradezco mucho que nos tienda la mano si antes no hubiera intentado cortárnosla”, lo que desató el entusiasmo en la bancada popular.
El presidente refutó la opinión de Díez de que habíamos sido rescatados y los reproches que momentos antes le había hecho sobre su “falta de ambición de país” y le recordó algunas declaraciones suyas defendiendo la necesidad del rescate, lo que también generó calurosos aplausos en su grupo.
Sus dardos a la portavoz de UPyD fueron constantes. “¿Acaso es usted la quintaesencia de la democracia?", le preguntó, para a continuación decirle con su habitual retranca: "deberia ser más modesta. Todo cometemos errores, salvo usted, que no los comete".
El duelo degeneró en un nuevo cruce de reproches que Rajoy no dio por finalizados hasta su segunda y breve réplica en la que volvió a esgrimir declaraciones de la portavoz de UPyD defendiendo con énfasis el rescate entre los aplausos de los diputados del PP.
