El Ministerio de Interior ha publicado hoy la formalización de la compra de al menos 7.000 artificios triples fumígenos (ATF), una munición que se dispara y crea nubes de humo, para el Cuerpo Nacional de Policía. En total, el coste es de casi 200.000 euros.
En 2012, el mismo departamento ya adquirió 4.100 de estos cartuchos para el mismo cuerpo. Además, a finales de 2011, el Gobierno adjudicó un contrato para el suministro de ATF y ATL (artefactos triples lacrimógenos, los llamados gases lacrimógenos) con destino a la Guardia Civil. En total, gastó más de un millón de euros en gases lacrimógenos y 416.779 en bombas de humo.
Todas estas adjudicaciones tienen un común denominador: la empresa contratada es la misma. Se trata de Falken SA, cuyo presidente y consejeros principales son miembros de una misma familia, los hermanos Bardisa Jordá. Todos son hermanos, según consta en la nota social de la boda de uno de ellos, de Ismael Bardisa Jordá, que fue diputado del PP en el Congreso en la sexta, séptima y octava legislaturas y que actualmente consta como consejero del Consejo Consultivo de la Comunidad de Madrid.
La firma Falken se ha hecho con la adjudicación publicada hoy en el BOE por ser la única empresa presentada al concurso. Además de los contratos ya mencionados, se hizo con otros idénticos en 2009, 2008, 2007 y 2003, entre otros años.
La adquisición de material antidisturbios va en la línea de los 20.000 chalecos antibala adquiridos en marzo y el aumento de un 1.780% en el gasto destinado a este tipo de equipamiento para el año 2013.
Información del blog El BOE nuestro de cada día.