"¿Va a asumir el Gobierno alguna responsabilidad por la muerte de 13 personas en la valla de Ceuta?". Esa es la pregunta a la que se ha enfrentado este viernes la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáez de Satamaría, tras la tragedia de Ceuta en la que 13 personas han perdido la vida cuando intentaban cruzar la valla en la zona marítima que da acceso a nuestro país. La número dos del Gobierno de Rajoy ha evitado hablar de responsabilidades y se ha limitado a anunciar la comparecencia del ministro que exigían los principales partidos de la oposición.
Santamaría ha aprovechado la rueda de prensa posterior al Consejo de ministros para "lamentar esas muertes y sobre todo la tragedia que lleva a ellas". Lejos de criticar la labor de la Guardia Civil que usó pelotas de goma y gases para contener la entrada de inmigrantes, el Gobierno "reconoce la labor que en este sentido llevan a cabo las fuerzas y cuerpos de seguridad del estado que tratan de paliar este drama de la emigración", señaló la vicepresidenta.
El ejecutivo quiere acortar los plazos al máximo y maniobra para que la comparecencia de Jorge Fernández Díaz se pueda producir esta misma semana.
