El PSC ha decidido aumentar el castigo a los tres diputados que rompieron la disciplina de voto la semana pasada en el Parlament. Si ayer la formación les suspendió de todos sus cargos orgánicos en el partido -quedaron fuera de la Ejecutiva y del Consejo Nacional-, este martes ha optado por retirarles también todos sus cargos dentro del grupo parlamentario. De este modo, Joan Ignasi Elena, Marina Geli y Núria Ventura dejarán de ser los portavoces socialistas en las comisiones de Cultura, Sanidad y Infancia, respectivamente.
Con esta sanción, los socialistas evitan expulsarles del grupo parlamentario, una medida que perjudicaría al partido que lidera Pere Navarro porque pasaría de 20 a 17 escaños -por debajo de los 19 del PP-, dado que deben ser los diputados quienes renuncien a su acta, algo que los tres desobedientes no están dispuestos a hacer.
La decisión de dejar a Elena, Geli y Ventura como diputados rasos la ha tomado la dirección del grupo del Parlament, reunida toda la mañana en la cámara. Se tratade un episodiomásenel pulsoentreladirección del PSCy los trescríticos,que la semanapasada desobedecieron lasdirectrices delpartidoen el Parlament de Catalunyay votaron -al lado de CiU, ERC E ICV-EUiA- a favorde pediral Congreso quetransfieralascompetenciasalaGeneralitatpara convocar unreferéndumde autodeterminación.
Más gestos contra la dirección
El gesto de los tres diputados de saltarse la disciplina de voto ha generado una serie de reacciones por parte de los socialistas del ala más catalanista del partido. Un manifiesto con cientos de apoyos a los tres diputados -entre los que se cuentan históricos militantes y exconsejeros- ha sido el ejemplo más significado. Pero también ha habido quien ha renunciado a sus cargos dentro del partido. Es el caso del alcalde de Flix, Marc Mur, que ha dejado su silla de secretario de la Ejecutiva Nacional del partido y la primera secretaría de la Ribera d'Ebre.
También hizo un movimiento parecido, el mismo día de la votación, la diputada Rocío Martínez-Sampere, que dejó la Ejecutiva aunque optara por votar de acuerdo con el partido.
Otro socialista que ha quedado fuera del Consejo Nacional, en este caso por imposición, ha sido Fabián Mohedano, suspendido ayer de su cargo en el partido por haber asistido a un acto de ERC.