El arquitecto Gonzalo Urquijo negó este lunes en la Audiencia Nacional que cobrara en negro del Partido Popular por las reformas que hizo en la sede de la calle Génova a partir de 2005. Sin embargo, cuando el juez Pablo Ruz le preguntó por los detalles de la documentación incautada en su empresa, sus explicaciones no convencieron al instructor del ‘caso Bárcenas’. “Estoy tratando de encontrar una explicación lógica a lo que dice y no la encuentro”, le llegó a espetar el magistrado.
Urquijo no se salió durante cuatro horas de declaración de la línea argumental que presentó el PP en un escrito a la Fiscalía Anticorrupción la pasada semana, afirman las mismas fuentes. Según el partido y el arquitecto, todos los pagos se realizaron por cheque o transferencia, nunca en metálico. Y si se llegaron a encontrar entre 60 y 80 anotaciones de recibís en la empresa de Urquijo fue porque el PP se los pedía, según cree él, porque los perdía con frecuencia o porque cambiaban las necesidades de la obra.
El arquitecto deslizó alguna crítica al PP. "La verdad es que pagaban fatal y por eso tuve que hablar en alguna ocasión con Bárcenas, para poder cobrar", aseguró. En otro punto de la declaración, Urquijo afirmó que más le "chocó" fue tener que firmar recibís cada vez que cobraba un cheque. "Siempre he tenido que entregar recibís para poder cobrar los cheques", añadió. Pero más adelante, desvió cualquier responsabilidad hacia el extesorero: "A lo mejor a Bárcenas le interesaba tener recibís para justificar otras cosas".
Sobre una de esas anotaciones, Urquijo dio una explicación en particular. Se trata de una anotación por un supuesto pago de 200.000 euros, de la que aseguró le fue dictada por Bárcenas mientras él viajaba en un taxi en el año 2008. Después añadió que no sabe si lo pasó a limpió y tampoco si llegó a cobrar esa cantidad.
Los agentes de la UDEF encontraron en la sede Unifica, la empresa de Urquijo, varios post-it con anotaciones de pagos que coinciden con anotaciones recogidas en los ‘papeles de Bárcenas’. Este lunes, el arquitecto dijo al juez que estas últimas anotaciones fueron tomadas en presencia de sus abogados, ya en el verano de 2013, cuando preparaba su posible declaración en la causa.
Urquijo solo contestó a las preguntas del juez, el fiscal y su abogado. Durante la declaración, su defensa incorporó una auditoría de Deloitte sobre las cuentas de Unifica. Según los investigadores, el PP pagó presuntamente en negro 888.000 euros por las distintas obras en la sede nacional del partido entre 2005 y 2011. Los conservadores lo niegan y aseguran que todos los pagos están recogidos en su contabilidad oficial. Urquijo se declaró hoy "un simple proveedor del PP" y añadió que la facturación a los conservadores solo representaba el 2,5% del total de su empresa, Unifica.
Las acusaciones habían pedido por la mañana la suspensión de las declaraciones de hoy debido a la reciente incorporación de un nuevo informe sobre la documentación incautada en Unifica. El juez lo rechazó, pero el informe salió a colación durante el interrogatorio. En él se recogen correos electrónicos sobre la petición de Antonio de la Fuente, exjefe de seguridad de Génova y cuñado de Bárcenas, en el que éste le pide al arquitecto un presupuesto ficticio para poder conseguir una hipoteca del banco. Urquijo reconoció este lunes ante el juez tal petición y la enmarcó en un favor por la amistad que habían fraguado durante años de relación profesional. En cualquier caso, el arquitecto aseguró que las cuestiones de dinero las trataba directamente con el extesorero.
